La Selección Colombia vuelve a escena con la obligación —y la esperanza— de reconectar con la victoria. Luego de cuatro jornadas sin saborear el triunfo en las Eliminatorias, el equipo dirigido por Néstor Lorenzo se jugará buena parte de su clasificación al Mundial el próximo 6 de junio, cuando reciba a Perú en el calor abrasador del Metropolitano de Barranquilla. Ese partido, más que un duelo regional, es un llamado urgente a despertar.
Colombia, que ocupa el sexto puesto con 20 puntos, aún conserva el control de su destino: quedan 12 unidades por disputar y se calcula que con cinco o seis puntos adicionales bastaría para sellar el tiquete directo al Mundial. Pero la inercia preocupa. Tres derrotas y un empate en las últimas cuatro presentaciones son cifras que encienden las alarmas, sobre todo por la falta de contundencia ofensiva y las dudas en el mediocampo.
El duelo ante Perú tiene tintes de final anticipada. No solo por lo que está en juego, sino por el contexto. El equipo inca llega con sed de reivindicación y, aunque más rezagado en la tabla, siempre ha sido un rival incómodo, ordenado y con buen trato de balón. La Tricolor, por su parte, no puede darse el lujo de especular: necesita el triunfo para liberar presión antes de viajar a Buenos Aires, donde enfrentará a la siempre temible Argentina cuatro días después.
El compromiso ante los peruanos se jugará el viernes 6 de junio a las 3:30 p.m., hora local, en el Metropolitano Roberto Meléndez. Una hora que ya se ha convertido en ritual, en apuesta climática, en símbolo de la “localía” caribe que tantas veces nos dio alegrías y que ahora también carga con la exigencia de un resultado inaplazable. Barranquilla, con su calor, su gente y su atmósfera, deberá volver a ser aliada.
La boletería, como era de esperarse, ya genera expectativa entre los aficionados. La Federación Colombiana de Fútbol anunció una preventa exclusiva para clientes Bancolombia con tarjetas premium que irá desde el 2 de mayo a las 8:00 a.m. hasta el 3 de mayo a las 7:59 a.m. Luego habrá una fase ampliada para todos los clientes Bancolombia y, finalmente, si quedan entradas, la venta general. Todo el proceso se realizará a través de Tuboleta, en su página oficial.
Pero más allá del entusiasmo comercial, lo esencial sigue siendo lo que ocurra dentro de la cancha. Néstor Lorenzo deberá demostrar que su propuesta no solo tiene estética, sino eficacia. La ausencia de un “nueve” confiable, la intermitencia de figuras como Luis Díaz y la fragilidad defensiva en momentos clave son factores que deberán corregirse si se quiere evitar otro sufrimiento premundialista.
Hay partidos que no admiten excusas ni consuelos. Este, frente a Perú, es uno de ellos. No será suficiente dominar la posesión, ni generar intenciones. Colombia necesita goles. Necesita ganar. Necesita recordar que su camiseta, cuando se juega con determinación, es más que una ilusión tricolor: es una promesa de carácter y talento.
El 6 de junio no se juega solo un partido de Eliminatorias. Se juega un punto de quiebre. O la Selección retoma el camino al Mundial con la frente en alto, o se enreda en la incertidumbre de una recta final que no perdona. En la tribuna, el país entero mirará con el corazón en vilo. Y en el campo, once jugadores deberán demostrar que el sueño sigue intacto.
